Zaragoza, ciudad bañada por el Ebro y azotada por los vientos del cierzo. Famosa por las fiestas en honor de su patrona, Pilar, y una catedral moderna donde "la Pilarica" aguarda las peticiones diarias de sus maños. Rodeada por otros monumentos históricos de su pasado romano y árabe, así como de la catedral Seo, hará de nuestro vuelo todo un viaje de descubrimientos.
Cuando tomemos un vuelo hacia Zaragoza podemos enlazar con otros vuelos o aprovechar algunas de sus muchas ofertas para descubrir su imponente sistema montañoso hacia el norte. Ordesa, Jaca o Panticosa son algunos de los destinos de muchos aragoneses y turistas ya sea para hacer senderismo o para practicar el esquí.
Hacia el sur cuenta con uno de los rincones más emblemáticos de la península: el monasterio de piedra. Entre ellas Calatayud, una pequeña localidad llena de historia.
Ya sea que nos guste descubrir monumentos o que sintamos debilidad por la naturaleza o por las ofertas culinarias, cualquiera de las ofertas en vuelos para Zaragoza será siempre una buena opción.
A tan solo diez kilómetros de la ciudad, tras nuestro vuelo, podemos coger un autobús cada media hora o alquilar un coche para aprovechar al máximo nuestra estancia. Aragón sigue teniendo precios muy baratos para alojarse o para comer un plato rico.
Si nos gustan las ciudades monumentales y descubrir la gran riqueza histórica que acompañan el desarrollo aragonés no debemos dejar pasar la oportunidad de visitar estas dos ciudades en donde iglesias, plazas y museos nos deparan muchas sorpresas.
Paseos por el Ebro.
Si no queremos salir de la ciudad podemos escoger alguno de los numerosos paseos por las orillas del Ebro de gran valor medioambiental.