


Un barrio que tienes que descubrir...
Un barrio que tienes que descubrir...
El barrio de la plaza Nation es una zona poco conocida pero muy valorada de París. De día es una zona muy dinámica y de noche reina la calma. Aun así, encontrarás una amplia selección de restaurantes y cervecerías. Dispone de un Printemps, unos grandes almacenes donde podrás hacer tus compras. Aunque no está en el centro de la ciudad, es una opción muy práctica, en una tranquila zona residencial, muy bien comunicada en transporte público.
El Agate dispone de 43 habitaciones, decoradas con colores diferentes. La mayoría está pintada con colores vivos (rojos, naranjas), mitigados por un mobiliario azul-grisáceo. Todas disponen de secador, ventanas con doble cristal, caja de seguridad, productos de tocador biológicos (de la marca COSMEBIO) y televisores de pantalla plana con Canal +. Tan sólo algunas habitaciones disponen de aire acondicionado individual.
Una entrada discreta en una gran avenida desvela un hotel con encanto y una decoración clásica, bastante parisina. El trato es familiar y eficaz. Cuando hace buen tiempo puedes disfrutar de una terraza exterior contigua a la coqueta sala de desayunos en la que reina una bonita fuente, coronada por un ángel. El hotel ofrece conexión inalámbrica y un ordenador con acceso a Internet, ambos gratis.
Idéalement placé, à 100m du métro/RER. Restaurants variés à proximité, dans un quartier calme mais animé (Nation). Excellente literie et accueil sympathique. Propreté irréprochable Possibilité de vue sur cour intérieure.
Transports en commun à proximité Restauration
Je n'ai pas eu d'inconvénients
Un hotelito que esconde un adorable patio interior, con algunas habitaciones que se sumergen en ese jardín de frescura...
Este bonito hotel, de piedra tallada, hace esquina entre el boulevard Voltaire y una pequeña calle. Sus habitaciones, clásicas, están equipadas con magníficos cuartos de baño.
Sin mayores pretensiones
En el entorno tranquilo de Nation, un establecimiento con un encanto a la antigua, en el que podemos disfrutar a gusto de un pequeño jardín.
Este hotel de diseño italiano y confort moderno está en el barrio de Nation desde donde podrás tomar la línea A del RER, y está cerca del centro de la ciudad.
Un hotel que merece la pena, es realmente encantador y con una decoración refinada.
La mayoría de las habitaciones de este hotel no tienen cuarto de baño. A pesar de que los precios son muy asequibles, la decoración no deja de ser original. Es perfecto.
Un Campanille de lo más original y atípico, muy agradable. El patio interior aporta una dosis de frescor muy placentera. El punto fuerte es el trato.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.