


Una referencia en el barrio.
Una referencia en el barrio.
El hotel Best Western Champs-Elysées está a dos pasos del Arco de Triunfo y de la avenida más bonita del mundo, los Campos Elíseos, en una callecita tranquila y cerca de muchas tiendas, bares y restaurantes de la cercana avenida de Ternes. El barrio está muy vigilado, por lo que es seguro. La parada de metro más cercana es Charles de Gaulle Etoile.
El establecimiento contiene 62 habitaciones que se reparten en dos categorías: "estándar" y "superior", con una "suite junior". Recientemente, se ha reformado todo el hotel. Las habitaciones no son muy grandes, aunque su decoración permite olvidar esa falta de espacio tan común en las habitaciones estándar de París. Las prestaciones son impecables: la climatización es individual, el wifi y la caja fuerte son gratuitos, el minibar está lleno y el servicio de habitaciones está disponible hasta las 2:30 h de la madrugada. ¿Qué más se puede pedir? Los cuartos de baño están bien acondicionados y el trato es irreprochable. Una apuesta segura.
Visto del exterior, el edificio es antiguo y bonito, y en el interior se ha conseguido darle encanto y caché. Las paredes han conservado el gusto por las decoraciones aristocráticas del antiguo propietario: chimenea gigantesca de piedra dominada por los estandartes de un noble, si te fijas bien verás la cerámica colocada al revés, mobiliario esculpido, frescos de época, etc. Las referencias a la Edad Media crean, una vez pasada la entrada, una ilusión a los clientes de estar vestidos con ropajes de antaño. La decoración de las plantas es más contemporánea y diferente en todas ellas.
salón de belleza, baño turco
Petit hôtel à deux pas des Champs Elysées, au coeur de Paris. Chambre standard petite mais propre et juste bien amenagée.
propre, fonctionnel , personnel très gentil
Chambre petite, acces difficile en voiture, difficile à trouver
bon hôtel, pas très insonorisé mais on y dort bien
personnel sympathique et serviable, vue sur l'arc de triumph
non insonorisé, on entend ce qu'il se passe dans les couloirs
El Balmoral es un hotel clásico y que se reivindica como tal. No ofrece falsas promesas ni cursilería alguna, tan solo un hotel tradicional con un personal muy amable.
Un 3*** moderno y discreto.
Un 3 estrellas idealmente situado.
Un hotel perfecto en un barrio de obligada visita y seguro.
Un establecimiento serio y muy bien ubicado.
La construcción del Hidden gira alrededor de un concepto atractivo: materiales puros, naturales, que transmiten un ambiente zen y tranquilo, cercano a la naturaleza. La decoración es minimalista pero elegante, con espacios amplios. El trato del hotel, cordial y agradable, está a años luz de las comodidades aduladoras de los grandes hoteles de la misma categoría, pero es mejor que sea así.
El establecimiento zen del barrio.
El hotel Cécilia, a dos pasos del Arco de Triunfo, reserva a sus clientes un trato cordial y atento, en una atmósfera elegante y clásica en la que te sentirás como en casa.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.