


Un establecimiento serio situado en el corazón del barrio Latino.
Un establecimiento serio situado en el corazón del barrio Latino.
Situado en una pequeña callejuela pintoresca y tranquila del barrio más antiguo de París, el barrio Latino, el hotel se encuentra en el centro del bullicioso Odeón. Junto al establecimiento hay numerosos bares y restaurantes, así que existen numerosas opciones donde elegir. También hay multitud de librerías y salas de cine por descubrir en la zona. En cuanto a visitas, no dejes de acudir a los jardines más bonitos de París, los de Luxemburgo, y también podrás visitar las tumbas de los personajes ilustres de la historia de Francia que yacen bajo la cúpula del Panteón. En las cercanías hay un aparcamiento público, aunque es de pago. Estación de metro más cercana: Odéon.
Las 30 habitaciones del establecimiento se dividen en dos categorías: Estándar y superior. Nosotros hemos visitado esta primera. La habitación es bastante grande, con una decoración sobria y práctica, con pesadas cortinas a ambos lados de la puerta-ventana, algunos muebles y armarios. La televisión de pantalla plana está colgada de la pared y emite canales vía satélite. Disponen de aire acondicionado individual y conexión wifi de pago, aunque no hay minibar. Tampoco cuentan con servicio de habitaciones. Los cuartos de baño disponen de ducha o de bañera.
El hotel está situado en un bonito edificio de corte clásico. La entrada posee un toque de distinción, el pasillo que conduce a la recepción es particularmente bonito, con numerosas lámparas en las paredes, junto a tapices y cuadros. La decoración es clásica y burguesa; en el salón hay unos sofás que invitan a sentarse a leer o, simplemente, a pasar el tiempo. También ofrece un puesto gratuito con conexión a Internet. La sala del desayuno, aunque no sea lo habitual, no está en el sótano, sino junto a la entrada. Posee un mobiliario de madera maciza y una chimenea que le dan un toque muy agradable. El trato es sumamente amable y acogedor. En la recepción te servirán bebidas frías o con alcohol las 24 horas.
El hotel se encuentra en una zona con mucho ambiente, rodeado de galerias de arte y por otro lado es muy tranquilo
Es un hotel 3* muy céntrico y a un precio asequible las habitaciones tiene estilo y los baños grandes
Las habitaciones eran pequeñas
Un establecimiento agradable en el corazón del barrio Latino.
Un 2 estrellas modesto, con una ubicación ideal pero unas prestaciones que no se corresponden con las tarifas.
Un encanto innegable, St Germain des Prés con un aire de la Toscana.
Para los amantes de las ambientaciones modernas, un muy bello alojamiento en el barrio del Odeón.
Un establecimiento serio con la categoría de los Best Western.
Un hotel con encanto en el corazón de la zona de galerías de París.
El hotel, teñido de los clásicos colores de su pasado, se esconde en la calle de Buci, que lleva el nombre de Simon de Buci, propietario de la puerta de Saint-Germain en 1350. El hotel de Buci es más bien tradicional y se aparta de las estructuras más contemporáneas. Se trata de un lugar tranquilo a pesar de estar muy céntrico, ideal para los turistas en busca de una atmósfera parisina algo anticuada y retro.
¿Quién dijo que dormir en el distrito 6 de París fuera un lujo? La redacción fue a comprobar por ti este pequeño hotel sin estrellas que figura en las numerosas guías de la ciudad...
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.