El hotel Duc de Saint Simon acoge a un público que arriba desde distintos lugares y por motivos muy diversos, pero nos descubrieron que sobre todo sus huéspedes suelen ser americanos, ingleses, en su mayoría, y posteriormente italianos, alemanes, sudamericanos y pocos españoles. Cuenta con 29 habitaciones y 5 suites, en las que su apariencia añeja no está reñida con las nuevas tecnologías, ya que podrás disponer de wiffi gratuito y de un televisor de plasma en todas ellas. Incluso para los olvidadizos o para aquellos que no dispongan de un ordenador portátil, el hotel tiene reservado un pequeño rincón para el uso de Internet, bien evidenciado (en la puerta aparece en colores florales el signo «@ ») con una gran pantalla Mac de la que podrás hacer uso gratuitamente también. De nuevo en las habitaciones, advertimos que cada una de ellas aguarda una particularidad: sus colores, sus formas, estampados y decoración son únicas en cada espacio, pero todas ellas comparten los colores y motivos que apelan a la naturaleza. Son muy amplias todas ellas, así como sus camas (tamaño matrimonio o inclusive algo más grandes) y dos de ellas tienen la suerte de tener terraza, bastante amplias, acompañadas por plantas, flores y árboles, así como de mesas, sillas y la más grande también posee una tumbona para disfrutar cómodamente del sol. También, especialmente, hay dos habitaciones que te harán sentirte todo un príncipe o una princesa por sus más que enormes camas con estilizados y elegantes baldaquines que cuelgan de los dormitorios. A tu llegada un detalle de bienvenida te estará esperando en tu cuarto: un estuche de frutos secos (cacahuetes) presentados de una forma muy refinada, acorde con la filosofía del hotel.