


Cerca de la avenue Matignon, el Hôtel Elysées Mermoz se alza como una galería de arte contemporáneo para ofrecer a sus huéspedes una estancia estilosa, ya sea por negocios o por placer.
Cerca de la avenue Matignon, el Hôtel Elysées Mermoz se alza como una galería de arte contemporáneo para ofrecer a sus huéspedes una estancia estilosa, ya sea por negocios o por placer.
La tranquila rue Mermoz se encuentra en el Triángulo Dorado que forman los Campos Elíseos y el Faubourg Saint-Honoré. Atrae tanto a los turistas como a los visitantes en viaje de negocios. El hotel Elysées Mermoz disfruta de esta situación geográfica y se encuentra en el cruce de un barrio de poder ya que la avenue Matignon y la Concorde están cerca. En dirección al barrio de negocios de la Madeleine, abundan las tiendas y los restaurantes. El hotel está situado a medio camino entre las estaciones de metro Franklin Roosevelt y Saint-Philippe du Roule. El aparcamiento más cercano está en la Avenue Matignon.
Si recibir es todo un arte, ¿qué puede ser más natural para el Elysées Mermoz que proponer como vestíbulo una galería de cuadros contemporáneos? Aun así no se ha olvidado el confort de los huéspedes, ya que se puede descansar en un sofá de diseño. El desayuno, en la habitación o tipo buffet, cuesta 12 euros. Se sirve en una bodega abovedada con mobiliario original. Levanta los ojos de tu plato cinco minutos para apreciar las molduras del techo abovedado. El hotel dispone de una sala de convenciones que rechaza toda austeridad: fotos majestuosas, techos altos y mobiliario moderno estilizan tus reuniones profesionales. Pero esta sala sólo tiene capacidad para ocho personas. El hotel no tiene cocina sino un servicio externo que sirve platos fríos para cenar.
Las 22 habitaciones del hotel Mermoz tienen un diseño sobrio y elegante que prioriza el confort ante todo. La iluminación roja de las lámparas tal vez no sea la más adecuada para trabajar de noche. Las habitaciones están equipadas con climatización, televisor con muchos canales, minibar y una bandeja de cortesía. También propone cinco suites con vistas a la cristalera del hotel. Los productos de aseo son de la marca Occitane, los cuartos de baño tienen WC separado e incluyen secador de pelo. Desafortunadamente la conexión wifi no está incluida, cuesta 5 euros al día. También puedes disfrutar de un servicio de tintorería con suplemento.
La fachada es impresionante y el hotel está bien equipado; lástima que la decoración sea tan anticuada, todo es un poco viejo.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
Un hotel que es como una pequeña joya de los años 30, repleto de encanto y de un ostentoso lujo.
El Elysée Park, un hotel con unas comodidades básicas y un estilo un tanto obsoleto, tienen como principal ventaja su magnífica ubicación, a pocos pasos de los Campos Elíseos.
El Beauchamps es un hotel ubicado en el Triángulo de Oro, detrás de los Campos Elíseos, que dispone de dos tipos de habitaciones, todas ellas con mucho confort y una gran calidad del servicio.
Un hotel muy tranquilo
Un hotel espléndido y muy original. En un entorno tradicional y noble, incluso rústico, los decoradores han aplicado dosis de diseño, modernidad y mezcla de materiales. Se trata de un hotel lleno de audacia, explosividad, finura y frescor.
Moderno, recientemente remodelado y bien situado, el Hotel Elysée Secret es un establecimiento con un concepto de diseño atractivo, situado en el corazón del octavo distrito de París, a proximidades de los Campos Elíseos y del Arco del Triunfo. Si bien el hotel cuenta con un concepto de diseño interesante inspirado en el gabinete contemporáneo «Boudoir contemporain» al estilo de la época de María Antonieta, sus habitaciones son estrechas y escasean las zonas comunes.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.