El hotel está situado en una calle tranquila y se accede por una entrada con jardín, tranquila y aislada del ruido. En la entrada hay un pequeño aparcamiento disponible. Las paredes del hotel están recubiertas de enredaderas. Este inmueble contemporáneo se renovó completamente en 2008 y cuenta con un total de 46 habitaciones. El vestíbulo es contemporáneo, moderno y amplio, y está limpio. Por su tamaño recuerda a una sala de espera del aeropuerto. Las chimeneas, las orquídeas blancas, la luz tamizada y los tonos violetas y naranjas vuelven la atmósfera más intimista. Además, los grandes ventanales permiten contemplar el verde de las plantas, que consiguen un gran efecto relajante. El vestíbulo se extiende alrededor del edificio, del bar (que abre de 12:00 a 1:00 h) a la veranda, la terraza y.la sala del desayuno. Han colocado muchos asientos, de modo que podrás acomodarte para leer un libro o esperar a alguien, con la agradable sensación de estar rodeado de vegetación... El jardín es pequeño, pero es muy agradable en verano. También hay que destacar que el hotel ofrece el servicio de mozo de equipajes para cuando llegan los clientes. Podrás consultar numerosos periódicos como El País, Le Figaro, el International Herald Tribune, The Guardian y Les Échos. A grandes rasgos, este hotel constituye un valor seguro gracias a sus habitaciones sencillas, amplias, cómodas y contemporáneas. Los servicios son muy buenos y tendrás la garantía de que estarás tranquilo. El hotel cuenta con varias habitaciones para fumadores, tendrías que solicitarlas en el momento de hacer la reserva.