


Magnífico hotel con el estilo de una casa de huéspedes. Ostenta una decoración moderna, pero que mantiene una línea acogedora y sencilla. Tiene un magnífico patio interior y una atmósfera repleta de encanto.
- Encanto
- Corazón
Magnífico hotel con el estilo de una casa de huéspedes. Ostenta una decoración moderna, pero que mantiene una línea acogedora y sencilla. Tiene un magnífico patio interior y una atmósfera repleta de encanto.
Este bonito hotel se encuentra en la parte oeste del distrito 14. Las inmediaciones no tienen mucho interés desde el punto de vista turístico. Sin embargo, para aquellos que viajen por negocios, hay que destacar que el hotel está justo al lado de la torre y la estación de Montparnasse. Las calles de los alrededores son animadas gracias a la presencia de numerosos comercios, y las plazas y las aceras están repletas de agradables restaurantes típicos franceses. Además, muchos callejones del barrio están recubiertos de árboles y de una vegetación exuberante, que en primavera se llenan de flores y desprenden unos olores magníficos. Hay dos paradas de metro al lado del hotel, Pernety y Plaisance.
Las habitaciones son casi todas dobles. Esta casa tiene la particularidad de proponer unas habitaciones muy diferentes. Cada planta tiene un tipo de decoración y su color correspondiente. Fucsia, naranja, amarillo o ciruela, según las preferencias de cada uno. En las habitaciones, la decoración moderna está anclada a unas referencias a cierta tradición. Las tapicerías de color tienen motivos de flores o dibujos que recuerdan las antiguas tapicerías retro. El estilo es sensual, a veces femenino, otras más bruto. Aunque las habitaciones no están recargadas ni son pretenciosas. De hecho, su sencillez le confiere un romanticismo y un gran encanto. Priman la cordialidad y el sentimiento acogedor. Conexión wifi gratuita.
La belleza de este hotelito se ha ganado todos los superlativos en la medida en que destaca, con un increíble encanto y un ambiente acogedor ejemplar. Este hotel tiene todas las características de una casa de huéspedes. Los clientes se sentirán como en casa. No tiene un mostrador impersonal, sino un pequeño escritorio detrás del que te espera un personal sonriente. Al igual que en una casa con encanto, hay un salón con una biblioteca y unos sofás Chesterfield de terciopelo muy elegantes y acogedores alrededor de una mesa baja. Así como libros, revistas y objetos personales de decoración. Un buen humor palpable se desprende de una combinación de colores acidulados y modernos. La sala del desayuno está compuesta de mesas altas y de sillones coloridos muy modernos. La ventaja principal de este hotel es su espléndido patio interior recubierto por una terraza de madera, y amueblado con mesas y sillas para relajarse y desayunar cuando hace buen tiempo. La genialidad es que esta hermosa decoración muy personalizada parece sorprender a los propietarios en su propia casa, y no da la impresión de que llegas a un hotel, sino a casa de unos amigos.
baño turco, EPA
très bon rapport qualité prix
métro à coté très confortable avec un accueil super
aucun meme en cherchant bien
la maison Montparnasse, bien située, à quelques pas du métro Pernety (et aisément accessible à pied depuis la gare Montparnasse) quartier agréable, quelques petites rues à découvrir, un quartier style village les gérants sont très sympathiques, petit déjeuner top (gateau et confitures maison) seul bémol, les chambres sont un peu petites
proximité de la gare, accueil charmant
chambres petites, mais propres
Hôtel de charme en plein coeur de Paris, chaleureux, convivial et confortable. Personnel accueillant et très serviable.
Rapport qualité prix, confort.
Ascenseur très exigü.
Un establecimiento de ambiente subsahariano, situado en una de las calles con más comercios del barrio.
Indicado para los hombres y las mujeres de negocios que buscan sobre todo la funcionalidad y un barrio peculiar. No lo reserves si estás buscando "lo auténtico".
Ubicado en una calle tranquila del distrito 14, un dos estrellas que prepara su revolución.
Un hotel lejos del centro y de los puntos de interés parisinos, pero con una decoración en las habitaciones muy contemporánea, llena de color, de fuerza, de alegría de vivir.
Hotel familiar de un barrio tranquilo ambientado en la región francesa de Auvergne
Espléndido hotel de estilo loft, moderno y acogedor, en el que se ha prestado atención a cada detalle de la decoración para sacar el máximo partido del atractivo y la personalidad de lugar.
Un buen establecimiento, con un estilo moderno y personalizado, situado a dos pasos de Pernety.
Un hotel bonito y sofisticado, renovado hace poco con un estilo moderno a la par que sencillo. Los colores y el mobiliario exhiben elegancia y un efecto acogedor.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.