


Este pequeño hotel es una grata sorpresa. Algunas habitaciones se han renovado con un estilo moderno y elegante y son encantadoras.
- Cultura
- Bien situado
Este pequeño hotel es una grata sorpresa. Algunas habitaciones se han renovado con un estilo moderno y elegante y son encantadoras.
El hotel se encuentra en un admirable barrio repleto de encanto. El espíritu bohemio de los callejones peatonales que hay a su alrededor son realmente encantadores. Estamos en pleno centro del barrio latino. ¿Cómo no perderse y dejarse llevar por la ola de transeúntes en el laberinto de las calles peatonales de este "barrio pueblo"? El hotel está rodeado por el ambiente elegante y de moda de las calles jóvenes, dinámicas y festivas del barrio latino y de Saint-Germain des Prés. Los monumentos turísticos más impresionantes, a los que París debe su fama, se encuentran a sólo varias centenas de metros: la catedral de Notre-Dame, el museo del Louvre y el museo nacional de la Edad Media, entre otros. Podrás visitar a pie las bonitas calles del distrito 5 y pasear por las callejuelas que rodean el Panteón. Si te apetece un poco de aire puro, puedes pasear por las alamedas de los Jardines de Luxemburgo. En cuanto a transportes, el RER B que comunica los dos aeropuertos y la línea 10 del metro pasan cerca del hotel.
Un precioso y pequeño hotel de 46 habitaciones únicamente, dobles, triples y cuádruples. Al igual que en las zonas comunes, se mezclan dos estilos de decoración. Las habitaciones más antiguas están decoradas con bonitos tejidos en las paredes, que les confieren un efecto sedoso excepcional. Se están creando nuevas habitaciones más modernas, con tonos actuales, dinámicas, modernas y con un mobiliario más elegante. Hay dos magníficas habitaciones grandes en la planta baja que dan al patio interior. Totalmente remodeladas, rompen abiertamente con los códigos. De colores dorados y chocolate, con paredes estampadas, azulejos elegantes, iluminación tenue... todo para hacerte sentir bien. Las habitaciones no disponen de minibar, aunque sí hay acceso Wifi gratuito.
El California Saint Germain es un hotel con muchas caras. En el mismo edificio se dan la mano dos estilos bien diferentes. De un lado, las viejas piedras de las paredes antiguas le dan un aire noble y rústico. Del otro, la decoración nueva y moderna rejuvenece el conjunto. La sala del desayuno está bajo el hotel, instalada en una antigua sala abovedada de carbón llena de encanto. En la parte de arriba, un moderno salón de bienvenida equipado con muebles de madera oscura de líneas modernas viene a romper con el clasicismo aparente. Los colores y las luces suaves imponen un ambiente acogedor y cálido muy elegante. Los propietarios han amueblado las salas comunes con objetos de decoración procedentes de anticuarios. El resultado es muy agradable. El hotel también tiene un pequeño patio interior.
masaje, sauna, hammam, puesta en forma
btt, fitness
Un 3* muy bien situado.
Un establecimiento serio, con habitaciones convencionales.
Una modernización progresiva que no acaba de terminar.
Se trata de un hotel retro-rústico, un poco señorial y muy bien situado en el barrio latino, con habitaciones bien cuidadas pero no demasiado contemporáneas.
Un hotel en pleno centro de París, en el barrio latino, cerca de Nôtre-Dame. Está muy marcado por una decoración de los años 70-80, pero no tiene un aspecto triste ni anticuado.
Precioso hotel con un estilo Belle Époque y un fuerte acento romántico. En él reina un encanto antiguo. Espléndidas vistas de numerosos monumentos importantes.
Un trato de reyes en el que es posible cocinar.
Este hotel, ubicado en un inmueble construido a finales del siglo XIX e inaugurado en 2001, parece una sala inglesa de fumadores, con sus sillones de cuero y sus tejidos de cuadros. Situado en medio del triángulo dorado de las universidades parisinas, a dos pasos del prestigioso Collège de France, el hotel parece un lugar de paso obligado tanto para los profesores como para los visitantes de la capital. De hecho, su clientela internacional es muy variada, compuesta especialmente por parejas y familias.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.