


Un establecimiento familiar y con encanto situado junto a los jardines de Luxemburgo.
Un establecimiento familiar y con encanto situado junto a los jardines de Luxemburgo.
Ubicado en una calle sin salida, en las inmediaciones no encontrarás ningún bar ni restaurante, ya que el bullicio de La Sorbona queda lejos... Imposible disfrutar de mayor tranquilidad. No obstante, el barrio no está exento de atractivo o de actividades. Además de estar en el famoso barrio Latino, los lugares más famosos como el Panteón o la catedral de Notre-Dame no están lejos. París también es famosa por sus numerosas plazas y jardines. El mayor jardín urbano, y el más bonito, es el de Luxemburgo y está a solo un minuto de distancia del hotel. A cinco minutos encontrarás un aparcamiento. Cabe destacar que el medio de transporte más cercano es el RER B, que te llevará directamente al aeropuerto de Roissy Charles de Gaulle. La parada de metro más cercana: Cluny.
Son de tamaño estándar, aunque las camas, con un armazón de hierro, son grandes. Están bien equipadas, con una decoración bonita y en la que se ha prestado especial atención a los detalles. Tienen una gran pantalla plana en la pared. La climatización es individual, el minibar está lleno y la caja fuerte es gratuita. No obstante, la conexión wifi es de pago. No hay servicio de restauración, exceptuando para el desayuno. Algo muy interesante es que todos los cuartos de baño tienen bañera.
El hotel tiene un ambiente acogedor, con el vestíbulo de suelos de parqué, una falsa chimenea que parece crepitar en un rincón y algunos sillones para relajarse un poco frente al falso fuego, además de un perchero que te hará sentir como si estuvieras en casa. El trato no se queda atrás, el personal es muy agradable y servicial. Hay una zona de salón aislada. Al fondo hay un gran ventanal que da a un pequeño patio acondicionado, pero en él no podrás desayunar cuando haga bueno, lo que es una pena. Este establecimiento con encanto sólo dispone de 26 habitaciones.
sauna
Rimbaud creó su nido en este hotel, abierto hace más de 150 años. Las habitaciones son pequeñas, sencillas y poco decoradas, pero el mobiliario antiguo le da cierto encanto. Está regentado por una familia y el trato es muy agradable.
Un sobrio hotel delante del jardín de Luxemburgo.
El hotel de la Sorbonne, lujoso en todos sus aspectos, está muy bien situado en un barrio animado, cerca de los numerosos monumentos históricos del centro de la ciudad. Aunque lo que más llama la atención del visitante es su decoración de diseño, con un cierto toque de moderno barroco y unas tonalidades sorprendentes y embriagadoras.
Un hotel de 4**** original y de diseño en el corazón del barrio St Michel. ¿Quieres un consejo? ¡No te lo pierdas!
Aunque tengamos la sensación de cruzar el umbral de una casa de la campiña inglesa como las que aparecen en las novelas del siglo XIX, el Relais Saint Jacques está situado a pocos minutos a pie de los jardines de Luxemburgo y del barrio de la Sorbona, en pleno corazón de París. Como ya habrás imaginado, el estilo es claramente neoclásico, en una atmósfera de bombonera. Recomendamos este hotel, muy apreciado por los americanos, a aquellas personas que busquen un poco de tranquilidad dentro del frenesí parisino y a pocos pasos del bullicio del Barrio Latino.
Un precioso hotel muy bien equipado. Te enamorarás del sitio.
Un bonito y pequeño hotel de gran sobriedad, con habitaciones simples, sin extravagancias en la decoración, pero con un innegable encanto. Por otra parte, la historia del hotel resulta cautivante y no dejará de interesar a los más curiosos.
El Cujas Panthéon es un hotel de tamaño mediano situado en un barrio muy joven y dinámico. En los alrededores encontrarás muchos locales para salir a tomar algo y monumentos por descubrir. Algunas habitaciones tienen un ambiente bastante anticuado.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.