


Un hotel sorprendente en un barrio histórico. La cercanía de la Concorde y de las Tuileries es uno de los principales atractivos. De este modo es posible dar agradables paseos por los jardines y dirigirse a los monumentos más bellos de París desde el hotel. El Richepanse tiene una personalidad muy marcada, ya que es uno de los pocos hoteles Art Déco de la capital. Hay que observar atentamente todos los detalles decorativos de las habitaciones.