


Este pintoresco hotel goza de una ubicación ideal e incluso reserva algunas sorpresas.
Este pintoresco hotel goza de una ubicación ideal e incluso reserva algunas sorpresas.
En el corazón del barrio latino, el hotel se encuentra junto a la Facultad de Medicina, en una pequeña calle tranquila, perpendicular al bulevar St Michel, que conduce hasta los jardines más bonitos de París: los de Luxemburgo. El ambiente es típico del barrio, hay un cine independiente al lado del hotel, algunos restaurantes exóticos y las calles están repletas de estudiantes que deambulan desde las universidades cercanas, como la de la Sorbona. A sólo 5 minutos a pie, nos encontramos uno de los monumentos de visita obligada de París, el Panteón, y más o menos a la misma distancia el mítico barrio de St Germain des Prés. Las numerosas líneas de metro comunican con las demás zonas de la capital. La estación de metro más cercana: Odéon.
Las 50 habitaciones son todas de la misma categoría: estándar. La decoración es sobria y se podría decir que no es muy actual, pero en general está limpio. El mobiliario es escaso. Hay una mesa, una silla y un espejo. Éste último, es de tamaño convencional en lo que se refiere a la hostelería parisina. La habitación está bien insonorizada. La climatización es individual, la conexión wifi y la caja fuerte son gratuitas. La televisión con pantalla plana colgada de la pared está conectada vía satélite y Canal+. El cuarto de baño es pequeño y casi todas las habitaciones tienen ducha. Hay que destacar que sólo tres habitaciones tienen bañera. La decoración se ha renovado, son muy grandes y, de hecho, son la mejor relación calidad-precio del distrito.
La fachada y la entrada son coquetas. El cliente se encuentra ante un auténtico ascensor parisino de los de jaula con rejas, aún en funcionamiento y que le subirá a los otros pisos. A la izquierda, el cómodo salón con los sillones y los sofás también se utiliza como sala de desayunos, con algunas mesas dispuestas a lo largo del gran ventanal para contemplar la vida pasar mientras se come uno un croissant. A la derecha, hay un gran mostrador de recepción donde te atenderá un personal encantador. Hay un aparcamiento público de pago a 30 m.
Este es un encantador hotel tradicional con unas habitaciones en la última planta especialmente agradables. Se dirige principalmente a una clientela de turistas que desea estar en el barrio.
Magnífica decoración barroca, muy colorida y con un encanto inaudito. Nos encanta.
Prueba a dormir en una cama con baldaquino en el barrio latino.
Un 3* algo caro para sus prestaciones.
Las habitaciones son poca cosa comparadas con el resto del hotel.
Una apuesta segura en este barrio.
El hotel, pequeño pero con buenas prestaciones, es una de las agradables sorpresas del distrito.
Situada en un hermoso edificio antiguo, la residencia Le Régent se alza en la bien nombrada rue Monsieur-le-Prince. Situado en el centro del barrio de la Sorbona, a dos pasos del Jardín de Luxemburgo, el Régent ofrece toda la comodidad en un ambiente moderno, lo que contrasta con el estilo clásico del edificio. Con un diseño pensado para familias de vacaciones, el establecimiento solo ofrece apartamentos.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.