Gonzalo González Beneytez
Jefe de sección
El Radison Blu le Metropolitan abrió sus puertas hace menos de un año y ¡ya tiene seguidores! El moderno diseño de tonos crudo y negro contrasta con la calidez de las chimeneas y crea un ambiente particular. Seguro que la piscina interior y la configuración particular de algunas de las suites han sabido también encandilar a los clientes.
Tribute Portfolio Le Metropolitan - © EASYVOYAGE
Tribute Portfolio Le Metropolitan - © EASYVOYAGE
El hotel está a pocos minutos a pie del Trocadero y goza de unas vistas espectaculares de la Torre Eiffel. En las cercanías encontrarás numerosos restaurantes y tiendas de lujo.
En las habitaciones predominan la madera y el lino blanco. La sobriedad y los materiales, la originalidad de las camas con baldaquino y las vigas aparentes recuerdan el ambiente de los balnearios. El cuarto de baño de granito de Zimbabue contiene una ducha muy espaciosa que se abre al exterior gracias a una puerta acristalada. Secador de pelo, albornoces y productos de tocador Anne Semonin. Todas las habitaciones disponen de conexión wifi gratuita, pantalla plana y un gran abanico de canales, radio despertador y soporte para el Ipod, caja fuerte y cafetera Nespresso. La superficie de las habitaciones clásicas es de 20 m2. Una de las suites de 40 m2 tiene la particularidad de contener una habitación cerrada en la entrada. En el centro se encuentra el cuarto de baño con ducha y bañera, una enfrente de la otra. El salón está separado del cuarto de baño por una mampara de madera trabajada. El servicio de habitaciones funciona las 24 horas y todo proviene de la cocina del chef.
Además de las habitaciones de diseño y de la original configuración del hotel, aquí encontramos espacios de calidad. El bar de cócteles abre a partir de las 18:00 h y se puede reservar para acoger una reunión privada de hasta 30 personas. El camarero sabe preparar unos 100 cócteles, algunos de ellos con aceites esenciales. Su obra maestra es un vodka con chispas de oro que hace referencia al centelleo de la Torre Eiffel. El hotel dispone de una sala de juntas para 12 personas, ¡más clásica y más propicia para trabajar! La manera en que el restaurante está organizdo crea espacios íntimos y acogedores, sin manierismo. El desayuno se sirve en forma de bufé en el mismo restaurante. En el sótano, hay un espacio de salud y una piscina interior alargada que juega con las columnas de madera oscura. En el espacio de salud hay una sala de masajes, un baño turco y, por si acaso te entra frío, ¡una chimenea! En el establecimiento resuena la música jazz y lo invade una atmósfera de olores.
La cocina de inspiración mediterránea es sencilla y refinada, sin pretensiones. El chef privilegia los productos frescos de temporada. Todo se cocina en el restaurante donde reina la transparencia y es que desde la sala se puede ver a los cocineros haciendo su trabajo. El restaurante tiene capacidad para acoger a 60 comensales. A mediodía se abre al público exterior y propone un menú muy asequible. Por la noche está reservado para los clientes del hotel.
Este hotel boutique de 48 habitaciones, entre ellas 5 suites que dan a la Torre Eiffel, fue decorado por el arquitecto de interiores François Champsaur. La madera mate y oscura hace resaltar el blanco roto de las paredes y de los sofás de cuero. La presencia de tres chimeneas, una de ellas en el espacio bienestar, tamizan y dan calidez al ambiente. El Radisson Blu le Metropolitan está gestionado por la misma dirección que el Dokhan's y acoge principalmente a una clientela de negocios.
wellness, masaje, hammam, sauna, salón de belleza, EPA
golf, water-polo
El Trocadéro es un hotel bien mantenido y bien ubicado.
Un hotelito con encanto con una agradable decoración. El trato está a la altura.
Un pequeño hotel que puede esconder sorpresas
Ideal para alojar a una clientela de negocios en grupo... así como ¡a los gastrónomos más exquisitos! También conviene a aquellos que vengan de vacaciones o en solitario, sobre todo si van al Renaissance Paris Hôtel Trocadéro cuando hace buen tiempo. La terraza es el punto fuerte del lugar, aparte por supuesto del restaurante supervisado por Ducasse y dirigido por Alexandre Nicolas.
Una situación ideal para descubrir otro barrio de París.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
Este hotel boutique de 45 habitaciones tiene mucho caché gracias al diseño de Fréderic Méchiche. Su aspecto clásico queda resaltado por las rayas blancas y negras que evocan la alta costura y que crea una sutil mezcla de estilos. Es discreto y delicado.
Este establecimiento de 4 estrellas forma parte de nuestras corazonadas en Paris. ¡Ubicado a proximidad de Notre Dame en el corazón del barrio « latin», este hotel es de los más románticos para pasar una estancia en la ciudad del amor! Encantador gracias a una sutil mezcla de tradición y de modernidad, el establecimiento supo hacer una verdadera síntesis del patrimonio histórico del edificio y de las necesarias adaptaciones al mundo del lujo hostelero.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.