


Una buena opción para los que están en el barrio por negocios o incluso para los que quieren estar en pleno centro de París
- Cultura
- Familia
- Fiesta
- Bien situado
- Descanso
- Encanto
Una buena opción para los que están en el barrio por negocios o incluso para los que quieren estar en pleno centro de París
A dos pasos de la plaza St Augustin, este establecimiento está en pleno centro de París, en el bulevar Malesherbes. Aunque el barrio está muy bien conectado en autobús y metro, no te hará falta usar el transporte público: puedes ir andando a la ópera, a los Grandes Almacenes, a la plaza de la Madeleine o a la Concorde. Esta es una zona de negocios, por lo que al llegar la tarde reina una gran tranquilidad y podrás disfrutar de los restaurantes y cervecerías que hay cerca, ya que el hotel no dispone de restaurante.
Las 45 habitaciones clásicas, superiores y deluxe del hotel tienen una decoración tirando a clásica, incluso un poco sosa. Pero la suerte es que a partir de noviembre de 2010 todas las habitaciones se renovarán, con un estilo más contemporáneo, usando colores y materiales más actuales: tonos ciruela, terciopelo, etc. Los cuartos de baño actuales son de mármol y madera. Los nuevos serán más modernos, con lavabos de diseño, grifería de gama alta y colores neutros. Las habitaciones disponen de climatización individual, minibar, caja fuerte, secador de pelo y albornoz. Cuando se renueven las habitaciones habrá una toma de corriente de Estados Unidos y una base para el iPod.
De momento, las zonas comunes se reducen a un pequeño vestíbulo y a la diminuta sala de desayunos (con una capacidad máxima de 10 comensales). La decoración es bastante sencilla; predominan los tonos marrones y naranjas, que le dan vida al conjunto. La ampliación de la sala de desayunos se prevé para el invierno de 2011. No hay un bar en el sentido estricto de la palabra, pero los huéspedes pueden tomarse algo en el salón. El hotel forma parte de una iniciativa de desarrollo sostenible de la compañía eléctrica EDF: concienciarán a los clientes sobre la necesidad de reusar las toallas y los empleados utilizarán lápices y bolígrafos reciclados.
El hotel se está renovando. De momento hay una habitación piloto: las demás habitaciones se abren en noviembre de 2010, y las zonas comunes en invierno de 2011.
masaje, salón de belleza, EPA, baño turco
tenis
El Sydney Opéra, hotel clásico y funcional, propone habitaciones perfectamente equipadas para descansar cómodamente después de una jornada de compras en los grandes almacenes, a menos que hayas venido al hotel para estar en el barrio de negocios de la Madeleine.
Un hotel con un romanticismo muy parisino, situado en un hermoso barrio. Las habitaciones se van renovando poco a poco para darles un toque más moderno. Un ambiente elegante y acogedor.
Te enamorarás de la hermosa decoración de este hotel familiar.
Le Lavoisier es un pequeño hotel con encanto, con una decoración sencilla y práctica. Algo escaso en equipamiento, ya que no hay restaurante ni instalaciones deportivas.
Este Mercure nos ha enamorado, rebosa de espacio y frescor.
"El lujo de sentirse como en casa": esa es la visión de Didier Moinel Delalande, director y propietario del Mathurin, que propone a viajeros de todo el mundo la oportunidad de alojarse en un establecimiento de lujo en París.
Un hotel moderno y, al mismo tiempo, clásico
He aquí un hotel clásico, de la más pura tradición de los hoteles clásicos parisinos. Lo recomendamos para aquellos a los que les guste este estilo de decoración y este ambiente tan particular, como si se hubiera detenido el tiempo.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.