¡Es imposible pasar por alto durante una estancia en Hossegor! Desde los llaveros kitsch con forma de tabla que se venden en las tiendas hasta la decoración de los bares, sin olvidar las criaturas con el pelo decolorado por el agua salada que llevan un diente de tiburón como colgante y que pueblan los albergues juveniles, aquí todo rezuma cultura surfera. Junto con Capbreton y Seignosse, Hossegor es el primer destino europeo de surf, con spots excepcionales cuyas poderosas olas con cilindros perfectos (los famosos beach breaks u olas de arena) atraen a surfistas de todo el mundo.
