Adosada al Palacio Poli, la Fontana de Trevi ocupa toda una parte de la plaza, con imponente forma de arco triunfal. Con 26,3 metros de altura y 49,15 metros de profundidad, es la fuente barroca más grande de Roma.
Rodeada de multitudes día y noche, la Fontana de Trevi se alza en el punto donde terminaba uno de los primeros acueductos de la Antigüedad. Solicitada por el Papa para honrar el acueducto Aqua Virgo, es hoy una de las mayores atracciones del corazón de la ciudad.