La zona también es famosa por el Horloge Fleurie de Genève, que atrae a autobuses llenos de turistas de todo el mundo, especialmente de Asia. Muchas personas se sienten a veces decepcionadas por su aspecto relativamente sencillo, pero en realidad el reloj es más conocido por su proeza técnica: el segundero, de 2,5 metros de longitud, es el más grande del mundo. Desde su creación en 1955, el reloj está adornado con 6.500 plantas, cuyo mantenimiento corre a cargo de los Services des Espaces Verts et de l'Environnement de Ginebra. Están dispuestas en ocho círculos que cambian de color con las estaciones.
Además del reloj de flores, el Jardín Inglés alberga varias estatuas, entre ellas una de Sir Winston Churchill y otra del fundador de Ginebra, Henri Dunant. Los visitantes también pueden disfrutar de una magnífica vista del lago Lemán y las montañas circundantes.