Granada siempre es bonita, pero otoño es su mejor época. Se llena de flores (especialmente en las ofrendas florales que le hacen a la patrona de la ciudad, la Virgen de las Angustias), de fiestas en los barrios (las del Albaicín son famosas por buenas), música (en los festivales de flamenco o el Granada Sound), comida de temporada en los mercados y olor de castañas por las callecitas serpenteantes.
El clima de esta ciudad sureña es perfecto en esta temporada, en la que ya no hace tantísimo calor, quedándose alrededor de los 20º y 25º centígrados. Visitar la famosa Alhambra y los jardines del Generalife (en los que en septiembre organizan conciertos) es ideal en esta época, sin tantos turistas ni sudor.