Bossòt es un municipio en la parte occidental del Valle de Arán, en Cataluña, cerquísima de los Pirineos. El pueblo es muy encantador, con casitas de piedra y tejados de pizarra, pero la gran maravilla de aquí es su entorno natural, que durante el invierno toma una paleta de colores que mezclan el verde de los pinos con el blanco de la nieve. El pueblo está delimitado, de un lado, por la montaña y del otro por la Garona, el río de aguas heladas que es flanqueado el arbolado paseo de Eth Grauèr.
Esta cabaña es perfecta para quienes disfrutan de los inviernos de montaña, especialmente para quien hace ski. Está a tan solo 9 kilómetros de los remontes Luchon-Superbagnères, Lys y Techous.