¿Qué mejor manera de descubrir Lisboa que empezar visitando su centro histórico? A medida que suba, el paisaje le conducirá a un monumento imprescindible, un miradouro que ofrece una de las vistas más bonitas del Puente 25 de Abril o del Tajo en el horizonte. Puede subir o bajar, pero siempre con la opción de un transporte cercano. La ciudad tiene mucho que ofrecer.
