El animado barrio de Kadikoy

El barrio de Kadikoy, un rincón atípico de la ciudad que aún no ha sido tocado por el turismo de masas, cuenta la historia de la colonia griega fundada en el año 658 a.C., que más tarde se transformó en zona residencial. Hoy alberga a unos 500.000 habitantes y es cada vez más festivo y animado.

Situada a orillas de Asia, lo primero que hay que hacer es cruzar el mítico Bósforo en un transbordador tradicional mientras se toma una taza de té y se admira el paisaje. La otra opción es tomar el histórico tranvía.

En comparación con la parte europea de Estambul, Kadikoy tiene un ambiente más relajado, que se puede experimentar tomando el tranvía Kadiköy-Moda Nostaljik. El vagón rojo ha recorrido un largo camino, tanto que parece sacado de un museo... pero la línea sigue funcionando y se utiliza como medio de transporte diario. Suba al tranvía cerca de los transbordadores y déjese llevar por Bahariye Caddesi a través de la colorida arquitectura de Moda. El trayecto en tranvía dura sólo 10 paradas.

Las callejuelas del centro de Kadikoy están llenas de vida, pero hay un lugar que consigue permanecer completamente quieto: el café turco de Fazil Bey. Es toda una institución: un pequeño y famoso oasis dedicado a tostar y moler sus propios granos desde 1923. La tienda vintage con sus muebles de madera está abarrotada de amantes del café.

Los numerosos murales de Kadiköy iluminan los muros de hormigón. Hay espacios de arte donde se puede hablar con artistas locales, comprar piezas asequibles y participar en actividades o cursos. Entre los espacios culturales, se puede visitar Arthere, fundado por un fotógrafo sirio para apoyar a sus compatriotas en la creación y exposición de arte. También organiza proyecciones y espectáculos y cuenta con una pequeña cafetería.

Consejo: otoño, invierno y primavera suelen ser las estaciones más activas para el arte.

Los habitantes de Kadiköy están orgullosos de este barrio y luchan por preservar su patrimonio, y la ópera Süreyya es un buen ejemplo de ello. Data de 1927 y, por desgracia, nunca representó una ópera y durante mucho tiempo se utilizó como cine hasta que cayó en el olvido. 80 años después, el municipio de Kadiköy puso en marcha una restauración masiva. La Ópera de Süreyya reabrió por fin sus puertas en 2007 y ahora es el mejor lugar para disfrutar de una ópera clásica, un ballet o un concierto. Consejo: la programación suele durar de enero a octubre.

Los turistas y los jóvenes estambulitas aprovechan cada vez más los nuevos locales nocturnos de Kadikoy. Un viejo clásico es el bar Arkaoda, que sin duda ha desempeñado un papel central en la transformación del barrio en uno de los lugares de moda de Estambul. Este emblemático bar, centro de música y arte, acoge a músicos underground. Relájese con una cerveza en el gran jardín o baile toda la noche.

El olor a especias, frutos secos y pescado recién capturado invade los sentidos al entrar en el mercado Günesli Bahce Sokak. Este encantador y bullicioso pasadizo detrás de la iglesia de Surp Takavor está influenciado por la herencia armenia, griega y albanesa. Consejo: tómate un vaso de zumo de pepinillos en el mostrador de Meshur Özcan Tursu, conocido localmente por curar milagrosamente la resaca.