En Mykonos, toda la actividad turística se concentra en Chora, la capital, y las hermosas playas del sur. El norte, en cambio, ha corrido una suerte ligeramente distinta. De este a oeste, la costa es principalmente rocosa y escarpada, con sólo un puñado de calas de arena... En un día ventoso, ¡es casi inhóspita!
Las Cícladas y Mykonos están especialmente expuestas cada verano al Meltem, un viento del Norte que sopla en ráfagas, a veces fuertes y que duran varios días seguidos, agitando el mar e imposibilitando el descanso en la playa.