Situada a pocos kilómetros de Marrakech, la Palmeraie es un remanso de paz, lejos del ajetreo de los zocos y las bulliciosas calles de la ciudad roja. Esta inmensa plantación, que data del siglo XI, cuenta con más de 100.000 palmeras repartidas en unas 15.000 hectáreas. En medio de esta exuberante flora, se han instalado varios complejos hoteleros, preservando al mismo tiempo la confidencialidad del lugar. La urbanización de la zona no ha empañado la Palmeraie, que ha conservado su autenticidad y... no le falta espacio. Campos de golf, residencias con encanto y hoteles de lujo se han instalado en este océano de palmeras. Esta excursión también puede realizarse a lomos de un camello o en coche de caballos, lo que le brinda la oportunidad de probar una divertida actividad que puede realizar solo o acompañado. Tendrás un baño de naturaleza y diversión al estilo de Beverly Hills.
Grupo de camellos descansando en la Palmeraie de Marrakech, Marruecos.
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El jardín presume de palmeras sublimes y vistas impresionantes, así como de una oferta más lujosa. Varios hoteles de alta gama con balneario se han instalado en la zona, ofreciendo toda una gama de servicios de lujo. El parque debe su nobleza a los árboles que lo componen: las palmeras. También crecen aquí otras especies exóticas, como los árboles frutales. El ecosistema de este bosque a las puertas del desierto es rico en biodiversidad.
Vista de las montañas desde la Palmeraie, Marrakech, Marruecos.
- ©kongaphotography/ShutterstockEntre las direcciones de la zona se encuentra el Palmeraie Rotana Resort, un hotel de lujo con un centro de spa de 5.000 m² con 16 salas de tratamiento, dos hammams, un jacuzzi, una sala de relajación y una piscina cubierta climatizada. El centro ofrece tratamientos a base de productos locales y naturales. Un retiro de bienestar para parejas o familias. También se puede pernoctar.
Marrakech
Si lo que buscas es una escapada cultural, hay un museo de arte contemporáneo escondido en medio de este gran oasis. Se trata de antiguos edificios agrícolas reconvertidos en galería de arte marroquí contemporáneo, rodeados de un parque de dos hectáreas; pequeña pero convincente. Se exponen numerosos pintores, a los que se unen otras prácticas artísticas. Calígrafos, escultores y fotógrafos están representados de forma permanente y temporal, siempre con un tema. No te pierdas el jardín de cactus gigantes.
Ya que hemos llegado hasta aquí, sería una pena perderse esta celebrada institución, que debe su fama a su magnífica piscina, una de las mejores de Marrakech. Agua azul, colchonetas y pérgolas de un blanco inmaculado y música lounge de fondo... Nikki Beach, tiene un pequeño sabor a Saint-Tropez en el corazón del palmeral del oasis. La carta no se queda atrás y ofrece una gran variedad de platos para compartir... o no, y para todos los gustos. El marco es realmente excepcional, lo que explica los precios bastante elevados.
Para los que buscan emociones fuertes o una experiencia fuera de lo común, hay muchas actividades disponibles. Algunas agencias ofrecen excursiones en quad. Al volante de nuestro pequeño bólido, recorremos la campiña marroquí y sus contrastados paisajes. Por el camino, nos cruzamos con algunas de las familias bereberes que viven en la región.
Marrakech
Otra forma original de visitar este océano de palmeras es en sidecar. Una actividad muy divertida. Un guía local te acompañará y tomará el control del pequeño vehículo durante toda la excursión. Al tratarse de una actividad privada, tu decides la ruta y el tiempo de parada.
Marrakech
Para los más precavidos, el oasis también puede visitarse por medios más tradicionales pero igualmente únicos, como un paseo en coche de caballos. Hay varias carretas que ofrecen este paseo desde la plaza Jemaa-el-Fna. El trayecto dura unas 2 horas. Es una oportunidad para charlar con el cochero, que seguro que te contará jugosas anécdotas sobre la Palmeraie y la historia de sus habitantes.
Carruajes y caballos en la medina, Marrakech, Marruecos.
- ©Mr Xiahou/ShutterstockComo estamos en un destino turístico muy popular, algunas personas pueden aprovechar para practicar turismo de masas, a veces en detrimento de los animales. Te aconsejamos que compruebes que los animales están bien cuidados y que elijas la montura adecuada.
Para disfrutar de una actividad típica marroquí, te recomendamos que te apuntes a una excursión al atardecer para descubrir la campiña de Marrakech de una forma diferente. Se trata de una actividad única que te sumergirá en el mundo de la puerta del desierto mientras disfrutas de una taza de té al atardecer, con las palmeras como únicas vecinas.
Muchas agencias ofrecen una experiencia inmersiva en el bosque de palmeras a lomos de un camello. Por el camino, pasarás por aldeas bereberes tradicionales y te detendrás un momento para compartir un té a la menta recién hecho. Es una oportunidad de vivir la cultura oriental en un marco excepcional. La excursión incluye transporte desde su alojamiento en Marrakech, trajes tuareg, un paseo en camello al atardecer y té servido por los lugareños. Cuesta unos 20 euros por persona.
Camellos con monturas típicas bereberes, La Palmeraie, Marrakech, Marruecos.
- ©cktravels.com/Shutterstock📍Ubicación: al norte de Marrakech.
🚌Cómo llegar: en taxi o coche de caballos (desde la plaza Jemaa-el-Fna).
