Agrupa un total de 138 habitaciones de las que la mayoría corresponden a categoría estándar junto con una suite y cinco superiores (cuatro de ellas con terraza). Todas las habitaciones están dotadas de mesa de trabajo, reposa-maletas, espejo de cuerpo entero, caja fuerte gratuita, balanza, secador de pelo (tipo pistola, profesional), ducha con mampara (efecto lluvia), amenities, etc. El estilo es tan acogedor como elegante, y casi todas son bastante luminosas. La única pega es el tamaño de algunas habitaciones, algo menor de lo esperado, lo cual se entiende porque el hotel estaba proyectado en un principio para funcionar como establecimiento de tres estrellas, en lugar de cuatro.
Sólo unas ocho habitaciones tienen bañera en lugar de ducha. La suite del hotel, además de incluir varios gadgets, un mobiliario entre vanguardista y elegante, y un reluciente parqué antiguo, tiene la peculiaridad de atesorar un antiguo fresco original del edificio. Se trata de una escena de aires bucólicos que los huéspedes afortunados pueden contemplar desde su cama, ya que el fresco ocupa todo el espacio del techo.