5 rutas de tren de pasajeros en España, para disfrutar del camino

El Tren Transcantábrico es un lujoso tren de pasajeros que realiza un recorrido de ocho días y siete noches entre San Sebastián y Santiago de Compostela, o viceversa, haciendo escalas en extraordinarios lugares como Santander, Oviedo, Gijón y Bilbao.

Los pasajeros que viajan aquí tienen atención exclusiva y el mayor confort. Hay habitaciones de lujo en las que la elegancia del siglo pasado se mezcla con las comodidades modernas, como un baño privado con hidromasaje, WIFI y servicio de habitaciones las 24 horas.

Una de las maravillas del Transcantábrico, es que se le ha dado un espacio muy importante a la gastronomía. El carro restaurante tiene especialidades de regiones como Galicia, Asturias, Cantabria y el País Vasco. Por supuesto, con maridaje de vinos locales.

Este veterano tren de pasajeros, que nació con el sueño de recorrer el verde norte de España, ha sido renovado y modernizado a lo largo de los años para asegurar que sus pasajeros siempre tengan lo mejor de lo mejor. Actualmente opera como el Transcantábrico Gran Lujo y el Transcantábrico Clásico, aunque a este último le cambiaron el nombre a tren Costa Verde Express en 2022.

Del otro lado de la península, está el lujoso Tren Al Andalus. Durante siete días y seis noches, esta locomotora visita las joyas del sur: Sevilla, Córdoba, Cádiz, Ronda y Granada. En una temática de la Belle Époque, quienes viajen en este tren disfrutarán de los lujos de los años veinte y las maravillas de la modernidad (como WIFI durante todo el viaje y un baño completo y privado).

Pensado para admirar el camino, los gigantescos ventanales de este tren regalan unas panorámicas impresionantes de los paisajes andaluces. Durante las paradas, los pasajeros pueden visitar patrimonios de la Humanidad como la Mezquita de Córdoba y la Alhambra de Granada. Y para cenar (o comer, también), se sirven delicias de la gastronomía andaluza, marinadas con los mejores vinos locales.

Una excelente opción de hospedaje en Sevilla

En caso de que te bajes del tren...

En tres días y dos noches, este tren conecta Bilbao y León, atravesando las joyas naturales y culturales de la zona. Siguiendo gran parte del recorrido del Camino de Santiago, de julio a octubre, esta es una excelente oportunidad para conocer los regalos de esta zona del país, que riqueza no le falta.

El interior del tren es lujoso en una moda clásica, con comodidades como bañera con hidromasaje privado, conexión a internet y cómodas camas. Es una excelente forma de viajar, con el mayor de los lujos y la comodidad, con permanentes vistas preciosas que cambian sin parar.

Partiendo desde el corazón de España –la estación de Atocha, en Madrid– este tren es una oda al escritor español más célebre y alabado. Es, evidentemente, un viaje cultural que tiene como destino Alcalá de Henares, la ciudad natal del autor de El Quijote. Durante el trayecto no se admira únicamente del paisaje y se disfruta de las instalaciones, sino que además hay todo un esfuerzo por trasladar a los pasajeros y pasajeras no solo en un viaje espacio, sino también en tiempo: la tripulación está vestida de época y no falta la declamación de algún tramo de los versos cervantinos.

Este tren no recorre una distancia tan larga, entonces las instalaciones no son como las de las opciones anteriores, con camas y bañeras. Aquí el enfoque está en la experiencia teatral.

Una vez arribados a Alcalá, la visita continúa en lugares emblemáticos como la calle Mayor, la Universidad, la Catedral o, por supuesto, la casa del gran Miguel de Cervantes.

Esta última opción también se aleja un poco del viaje enfocado en el lujo, y se inclina más hacia la cultura y la creación de experiencias verdaderamente inigualables. El Tren de Campos de Castilla es un plan de fin de semana para conocer la historia, gastronomía y los paisajes que han inspirado a los escritores españoles, especialmente al extraordinario Antonio Machado.

Partiendo del centro del país –en Madrid, Alcalá de Henares o Guadalajara– este viaje se adentra en la España de inicios del siglo XX para descubrir los paisajes de Castilla en compañía de los versos de muchos poetas. En el tren se hace teatro continuo, que se mezcla con la cotidianeidad del viaje: el revisor es un cascarrabias, hay una curandera bromista y una maestra de nombre Clara Campoamor.

Entre historias, leyendas y poemas, la escapada lleva hasta Soria y a lugares emblemáticos de la región como la Laguna Negra y el Yacimiento de Numancia.